Desde que estalló la burbuja inmobiliaria con la crisis, el miedo a que un concurso de acreedores diera al traste con el proyecto y te dejara sin ahorros echó para atrás a muchos compradores a la hora de comprar vivienda de nueva construcción. Pero el cambio de coyuntura económica, con mayor financiación por parte de los bancos, ha vuelto a llenar de grúas el paisaje.
Comprar de esta manera supone, en general, pagar menos por tu casa, pero es una operación que genera lógicos recelos: cuando das dinero a cambio de un bien que aún no existe físicamente, parece que aumenta el riesgo de equivocarte o de que te engañen. Para que no sea así, en Naranja Spain te damos una serie de claves.
Averigua todo lo posible sobre la compañía (promotora, inmobiliaria...) que vende las casas: una empresa de solvencia reconocida y cuyas promociones anteriores hayan sido un éxito siempre tendrá menos riesgo. Entérate de precios de otras promociones parecidas, mejor si se están construyendo en la misma zona, para establecer comparaciones. Y comprueba que el solar ha sido efectivamente adquirido por la empresa, que tiene todos los permisos pertinentes, etc.
La empresa que oferta la casa está obligada a facilitarte: certificado del Registro de la Propiedad en el que se refleja la titularidad del solar (quién es el dueño), la inscripción de obra nueva y la situación de cargas y gravámenes (impuestos, etc.) de la finca; proyecto técnico aprobado y licencia de edificación (sin los cuales no se puede construir); Cédula Urbanística del Ayuntamiento, que garantiza que el terreno es edificable y la existencia de equipamientos como zonas verdes, etc., y copia de la póliza de seguro que avala las cantidades que entregues a cuenta (la señal, anticipos...).
Además, tienes derecho a conocer los datos legales de la promotora (nombre, razón social, domicilio e inscripción en el Registro Mercantil) y del arquitecto, así como la fecha de entrega, el precio total (incluyendo intermediarios y posibles modificaciones del proyecto) y la forma de pago (plazos, intereses...).
Lo siguiente que debes pedirle al vendedor o al constructor es:
Una descripción de la vivienda con planos detallados (superficie útil y construida, distribución, emplazamiento de las instalaciones eléctricas, de agua, gas y calefacción) y también general del edificio, de sus zonas comunes y del trazado de las redes de servicio; y una memoria de calidades que recoja los elementos y materiales que se van a emplear en la construcción.
Es importante que sepas en qué debes fijarte para valorar si te interesa o no la compra; ten en cuenta aspectos como la situación del edificio en planta, dentro del solar y de la zona, la situación de la vivienda dentro del edificio, el número de habitaciones (y si son interiores o exteriores), los metros cuadrados útiles, la existencia de garajes o trasteros, la posición de los pilares, salidas de humo, ventilación y tuberías, los aislamientos térmicos y acústicos previstos en el proyecto, los armarios empotrados, la calidad de los materiales y la posibilidad de hacer mejoras.
Si todo es correcto y el proyecto te convence, ha llegado la hora de formalizar el contrato. En la venta sobre plano es inevitable la entrega de dinero a cuenta o señal: recuerda que esas cantidades se deducirán del precio final y que así debe constar por escrito. Lee el contrato de compraventa con detenimiento antes de firmarlo y observa que se detallen los posibles cambios en la construcción, el precio o los plazos, y que se establezcan limitaciones a ese respecto.
En Naranja Spain nuestro cometido es hacerte todo mucho más fácil. Por eso, realizamos una supervisión detallada de todo el proceso de compraventa durante todas las etapas, proporcionándote toda la información posible. Gracias a nuestro equipo de agentes que habla varios idiomas, te atendemos en español, inglés, lituano, sueco, ruso, y de forma eventual en alemán y francés.
Ponte en contacto con nosotros si te gusta alguna de las viviendas que ves en nuestra web. Puedes llamarnos por teléfono, escribirnos un correo, rellenar el formulario de nuestra página web, o pasarte por nuestras oficinas de Guardamar.