Más es más, menos es aburrido, nunca es demasiado… son frases que nos pueden ayudar a entender qué es el diseño maximalista.

Esta tendencia en decoración aparece a finales de la década de los noventa. Una tendencia que regresa pisando fuerte en 2021, surge en oposición y como alternativa al minimalismo.

Espacios sobrecargados, colmados de estampados, con diferentes colores y diferentes texturas formando una decoración muy llamativa, todo lo contrario al estilo minimalista.

La decoración maximalista no está sujeta a un racionalismo, aunque pretende mantener la estética y algún tipo de equilibrio. Los elementos elegidos tienen que combinarse de alguna forma para que el resultado sea coherente y no una acumulación de cosas al azar. Está basado en la libertad para decorar, en la creatividad.

Una de las características de la tendencia maximalista es la influenciada por la decoración clásica. Una mezcla de estilos barroco, rococó y victoriano con toques de un estilo más futuristas.

La mayor apuestas del maximalismo son los cuadros grandes, con marcos antiguos y ostentosos de color dorado envejecido y esta vez se suelen combinar con espejos que, además de dar más amplitud a tu hogar nos ayudan a darle un toque muy elegante.

Muebles con formas onduladas, con un toque vintage, combinados con mobiliario estilo industrial dando personalidad a tu hogar. Textiles de diferentes texturas en liso y distintos estampados.

Pinterest via Fiona O’shea

Otra tendencia maximalista que también estamos viendo son paredes forradas con materiales que buscan la sofisticación como por ejemplo el papel pintado colorido y con estampados voluminosos.

papeles de los 70.com

En cocinas se están utilizando azulejos de colores para zonas concretas. Con un aire un poco andaluz, que consiste en elegir azulejos de diferentes colores y colocarlos sobre una de las paredes o una zona de la cocina, dando un aspecto sobrecargado pero también muy colorido.

Molinacaballero.com