Como ya sabemos, la pandemia del coronavirus nos ha obligado a realizar muchos cambios en nuestras vidas.

Entre otros se encuentran la aceleración de la digitalización, el teletrabajo, las medidas de distanciamiento, restricciones de movilidad etc… Lo que ha afectado a nuestra forma de vivir, de trabajar y de socializar, lo que nos lleva a pasar más tiempo en nuestra vivienda.

Todo esto ha provocado una “nueva normalidad”, la que será de aquí en adelante una nueva forma en nuestra manera de vivir.

Esto también ha afectado al sector inmobiliario, es una de las industrias que más está siendo impactada por la incertidumbre, la economía y el distanciamiento social impuesto por el gobierno, teniendo que adaptarse a las nuevas circunstancias dando paso a los avances tecnológicos.

Los servicios digitales han facilitado que el sector inmobiliario siguiera funcionando durante la pandemia, con cierta normalidad, a pesar de las restricciones y limitaciones del último tiempo.

La transformación de las nuevas tecnologías permiten realizar tours virtuales de viviendas con el móvil y cerrar transacciones de forma telemática mediante contratos inteligentes, además, la solicitud de una hipoteca 100% online, son algunas de las prestaciones que la inmobiliaria Naranja Spain puede ofrecer a sus clientes.

El Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) revelaba, unos meses atrás, que el 23% de los ciudadanos han aumentado la compra de viviendas vía online durante la pandemia.

La nueva demanda insiste en áreas retiradas de la ciudad como la Costa Blanca, esto se debe a que con el confinamiento muchas personas se han dado cuenta que sus viviendas y ubicaciones no cumplían con sus necesidades del día a día.

La “nueva normalidad” definitivamente ha cambiado las necesidades de los futuros compradores de viviendas: mudarse o buscar un segundo inmueble con espacios más amplios, zonas exteriores, con más luminosidad, estancias para teletrabajar y de descanso es el cambio más notorio que el Covid-19 ha generado en el sector inmobiliario este 2021. Casi el 25% de los europeos se plantea un cambio de vivienda a raíz de esta situación.

Esto apunta a una mayor demanda de obra nueva y viviendas unifamiliares . Pero sin subestimar a los inmuebles de segunda mano que se verá aumentada su demanda por el factor ubicación, un aspecto que influirá también en el precio de estos inmuebles.

El mercado de alquiler afronta un panorama impredecible por la falta de seguridad jurídica, que puede repercutir negativamente en la oferta y endurecer el acceso a determinados colectivos, aunque desde Naranja Spain inmobiliaria, seguimos apoyando y ofreciendo este servicio tan demandado en Costa Blanca.

También hemos podido observar la importante caída que ha tenido la actividad por parte de los compradores extranjeros, la compraventa se ha visto afectada por la prohibición de viajar entre países, debido a la pandemia. La información más actualizada del Consejo General del Notariado refleja una bajada en la media del 37,4 % interanual en la compraventa de vivienda por parte de compradores extranjeros en el primer semestre del 2020.

Según la Tasadora Instituto de Valoraciones, estos datos reflejan el impacto que han tenido las restricciones para viajar entre países y la incertidumbre sobre la evolución de la pandemia en el mercado inmobiliario español.

La tasadora hace hincapié en que, “Todo parece indicar que esta ralentización de las transacciones podría mantenerse mientras sigan las restricciones. No obstante, a medio-largo plazo, se espera que España siga atrayendo el interés de los extranjeros gracias a factores como las zonas costeras, el clima o las buenas oportunidades que ofrece con respecto a otras ciudades europeas”.